• Ermita del Cristo de El Pardo

Tu boda en la Ermita del Cristo de El Pardo

Frente a la Ermita del Cristo de El Pardo hay un amplio parking para coches. En caso de que hayas contratado autobuses para la llegada de tus invitados a la boda,  la carretera que da acceso a la iglesia es lo suficientemente ancha como para que los autobuses puedan parar frente a ella.

Boda en el Cristo de El Pardo

La Ermita del Cristo de El Pardo es uno de esos rincones con historia en Madrid que, aunque no siempre están en el foco turístico, tienen un encanto especial y un significado profundo para los vecinos del pueblo y los cristianos de Madrid. Situada en la zona de El Pardo, esta pequeña iglesia data del siglo XVI y está cargada de tradición y devoción popular.

En el Cristo de El Pardo, específicamente en el Convento de Nuestra Señora de los Ángeles, actualmente reside una fraternidad de siete hermanos de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos.

Tras atravesar la puerta de entrada a la iglesia, enfilamos un pequeño pasillo que llega hasta el altar. Llegamos con tiempo suficiente para preparar los instrumentos, partituras y poder hablar con tranquilidad con el sacerdote, para coordinar el guion de la misa con el musical.

Justo encima de nuestras cabezas podemos divisar un coro, muy apropiado para grandes agrupaciones. Dado el tamaño de la ermita, las formaciones más adecuadas son las de dúo, trío o cuarteto de cuerda, con o sin soprano. Nosotros preferimos situarnos cerca de los novios; la sonoridad es mejor y el efecto estético de la agrupación de cuerda es mucho más vistoso.

Desde nuestra ubicación bajo el dintel de la puerta de la izquierda, podemos divisar la imagen del Cristo yacente de El Pardo, obra de Gregorio Fernández. Es una pieza central de la veneración en este convento, el de Nuestra Señora de Los Ángeles.  

La construcción de la ermita se remonta a 1559, durante el reinado de Felipe II, quien tenía en El Pardo uno de sus palacios favoritos. La historia cuenta que la ermita fue levantada para albergar la imagen del Cristo de El Pardo, una talla de madera que, según la leyenda, fue traída desde Italia en el siglo XVI.

Uno de los momentos más importantes en la historia de la ermita fue en 1774, cuando se llevó a cabo una restauración importante bajo la dirección del arquitecto Juan de Villanueva, famoso por su trabajo en el Museo del Prado. La restauración ayudó a conservar la estructura y a reforzar su carácter sencillo pero lleno de historia. 

Como se puede apreciar en las fotos, el altar es sencillo pero muy bello. En definitiva, esta iglesia es perfecta para los novios que celebren bodas de tamaño pequeño y medio y que quieran casarse en un lugar con encanto.

Puedes conocer nuestra propuesta musical para ceremonias religiosas con misa.